Historia
La Biblia es una compilación de textos que en un
principio eran documentos separados (llamados «libros»), escritos primero
en hebreo, arameo y griego durante un dilatado periodo de tiempo y después
reunidos para formar el Tanaj (Antiguo Testamento para los cristianos) y
luego el Nuevo Testamento. Ambos testamentos forman la Biblia cristiana. En sí
la Biblia fue escrita a lo largo de aproximadamente 1000 años (900 a. C. -
100 d. C.). Los textos más antiguos se encuentran en el Libro de los
Jueces («Canto de Débora») y en las denominadas fuentes «E» y «J» de la
Torá o Pentateuco, que son datadas en la época de los dos reinos (siglos X
a VIII a. C.). El libro completo más antiguo, el de Oseas es también de la
misma época. El pueblo judío identifica a la Biblia con el Tanaj (no
consintiéndose bajo ningún concepto el término Antiguo Testamento) y no acepta
la validez del llamado Nuevo Testamento, reconociéndose como texto sagrado
únicamente al Tanaj.
La Biblia cristiana que conocemos hoy fue
ensamblada por primera vez en el Concilio de Hipona en el año 393 de nuestra
era.
Dicho canon de 73 libros (46 pertenecientes al llamado Antiguo Testamento, incluyendo 7 libros llamados actualmente Deuterocanónicos -Tobit, Judit, I Macabeos, II Macabeos, Sabiduría, Eclesiástico y Baruc- que no son reconocidos por el canon judío ni valorados como canónicos por el protestantismo, y 27 al Nuevo Testamento) fue confirmado en el Sínodo de Roma en el año 380, y ratificado en el Concilio de Cartago en el año 397, y luego nuevamente confirmado por decreto en la cuarta sesión del Concilio de Trento del 8 de abril de 1546. Ninguna de estas decisiones fue reconocida ni asumida entre los protestantes, surgidos a partir del Siglo XVI, ni por distintas denominaciones paraprotestantes, surgidas a partir del Siglo XIX. El Canon de las Biblias Cristianas Ortodoxas es aún más amplio que el Canon de las Biblias Católicas Romanas, e incluye el Salmo 151, la Oración de Manasés, y los Libros I Esdras y III Macabeos.
Dicho canon de 73 libros (46 pertenecientes al llamado Antiguo Testamento, incluyendo 7 libros llamados actualmente Deuterocanónicos -Tobit, Judit, I Macabeos, II Macabeos, Sabiduría, Eclesiástico y Baruc- que no son reconocidos por el canon judío ni valorados como canónicos por el protestantismo, y 27 al Nuevo Testamento) fue confirmado en el Sínodo de Roma en el año 380, y ratificado en el Concilio de Cartago en el año 397, y luego nuevamente confirmado por decreto en la cuarta sesión del Concilio de Trento del 8 de abril de 1546. Ninguna de estas decisiones fue reconocida ni asumida entre los protestantes, surgidos a partir del Siglo XVI, ni por distintas denominaciones paraprotestantes, surgidas a partir del Siglo XIX. El Canon de las Biblias Cristianas Ortodoxas es aún más amplio que el Canon de las Biblias Católicas Romanas, e incluye el Salmo 151, la Oración de Manasés, y los Libros I Esdras y III Macabeos.
El Antiguo Testamento narra principalmente la
historia de los hebreos; el Nuevo Testamento la vida, muerte y resurrección
de Jesús, su mensaje y la historia de los primeros cristianos.
El Nuevo Testamento fue
escrito en lengua griega koiné. En él se cita con frecuencia al Antiguo
Testamento de la versión de los Setenta, traducción al griego del Antiguo
Testamento realizada en Alejandría en el siglo III a. C.
La Biblia es para los creyentes la palabra de Dios
por ser indudable para estos su inspiración divina. Es un libro
eminentemente espiritual y habla sobre la historia de la humanidad, su
creación, su caída en el pecado y su salvación, que expone cómo el Dios creador
se ha relacionado, se relaciona y se relacionará con el ser humano. De igual
forma, la Biblia expone los atributos y el carácter de Dios.
Para los creyentes, la Biblia es la principal
fuente de fe y doctrina en Cristo. En el Siglo XVI los diferentes movimientos
de la Reforma Protestante comenzaron a experimentar un alto desgaste en
discusiones filosóficas y a separarse unos de otros; para menguar este
problema se definió el principio llamado «sola escritura», que significa que
solamente la Biblia puede serconsiderada fuente de doctrina cristiana. Para la
Iglesia Católica Romana, además de la Biblia, también son fuente doctrinal
la tradición, las enseñanzas de los Padres de la Iglesia (discípulos de
los Apóstoles), y decisiones emanadas de Concilios. Esta divergencia entre
cristianos se intensificó al asumir la Iglesia Católica Romana la idea de que
el Papa, como único «sucesor de Pedro», y, consecuentemente, «custodio y
depositario de las llaves del Reino de los Cielos», debía ser «infalible» en
asuntos de fe, moral y doctrina cristiana (Dogma de la Infalibilidad
Papal). Mientras que los cristianos protestantes rechazan esta aseveración
y consideran como cabeza única de la iglesia a Jesús de Nazareth, llamado
Cristo. Para ambas partes esta gran diferencia ya no es considerada tan
solo en términos filosóficos o religiosos, sino como designios divinos
plasmados y asentadosen la Biblia misma.
Para los Judíos Ortodoxos, por supuesto, el Nuevo
Testamento no tiene validez. El rabínico considera como fuente de
doctrina el Talmud, mientras los Caraítas defienden desde el siglo VIII el
Tanaj como única fuente de fe.
Antiguo y Nuevo Testamento
El canon del Antiguo Testamento cristiano entró en
uso en la Septuaginta griega, traducciones y libros originales, y sus
diferentes listas de los textos. Además de la Septuaginta, el cristianismo
posteriormente añadió diversos escritos que se convertirían en el Nuevo
Testamento. Poco diferentes listas de las obras aceptadas siguió desarrollando
en la antigüedad. En el Siglo IV, una serie de Sínodos fue elaborando
listas de escritos sagrados que fijaban un Canon del Antiguo Testamento de
entre 46 y 54 distintos documentos y un Canon del Nuevo Testamento de 20 a
27, siendo este último el utilizado hasta el día de hoy; el cual fue
definido finalmente en el Sínodo o Concilio de Hipona en el 393 d.C. Hacia el
año 400, Jerónimo había escrito una edicióndefinitiva de la Biblia en latín
(véase la Vulgata), el Canon de la cuál, debido en parte a la insistencia del
Papa Dámaso, fue hecho coincidir con decisiones de varios de los Sínodos
reunidos con anterioridad. Con el beneficio de la retrospectiva se puede
decir que estos procesos establecieron de manera eficaz el Canon del Nuevo
Testamento, aunque hay otros ejemplos de listas canónicas en uso después
de este tiempo. Sin embargo, esta lista definitiva de 27 libros no fue
legitimada por ningúnConcilio Ecuménico sino hasta el Concilio de Trento
(1545-63).
Durante la Reforma Protestante, algunos
reformadores canónicos han propuesto diferentes listas de lo que se
encuentra actualmente en uso. Aunque no sin debate, lo que se conoce como
Antilegomena -algo que es contradicho o discutido. Este calificativo fue usado
por los padres de la Iglesia para clasificar aquellos libros del Nuevo
Testamento que, aunque eran leídos públicamente en las iglesias, no eran
universalmente aceptados como genuinos y no habían sido incluidos en el canon
de la Biblia. Hay siete libros que en un tiempo fueron considerados
Antilegomena y que posteriormente fueron incorporados al canon de la
Biblia Hebreos, Santiago, Segunda de Pedro, Segunda y Tercera de Juan, Judas y
Apocalipsis- la lista de los libros del Nuevo Testamento vendría a seguir
siendo el mismo, sin embargo, el Antiguo Testamento -los textos presentes en la
Septuaginta,pero no incluidos en el canon judío- cayó de favor en el
momento en que vendría a ser eliminado de la mayoría de los cánones
protestantes. Por lo tanto, en un contexto católico estos textos se denominan
libros deuterocanónicos, mientras que en un contexto protestante al que se
hace referencia como Apócrifa, la etiqueta se aplica a todos los textos
excluidos del canon bíblico que estaban en la Septuaginta. Cabe señalar
también, que los católicos y los protestantes describen algunos
otros libros, como el libro de los Hechos de Pedro, como apócrifos.
Por lo tanto, el Antiguo Testamento protestante de
hoy tiene un libro 39 -el número varía de la de los libros en el Tanakh
(aunque no en contenido) a causa de un método diferente de la división-,
mientras que la Iglesia Católica Romana reconoce 46 libros como parte del
Antiguo Testamento canónico. El término «Escrituras hebreas» es sólo sinónimo
del Antiguo Testamentoprotestante, no católico, que contiene las Escrituras
hebreas y textos adicionales. Tanto los católicos y los protestantes
tienen los mismos 27-libro del Canon del Nuevo Testamento.
Estructura
Un libro de la Biblia es un grupo establecido de
escrituras. Por ejemplo, el libro de Salmos (en hebreo Tehilim o «Canciones
de alabanza») tiene 150 canciones (151 en la versión de los Setenta),
mientras que la Epístola de Judas es una carta de media página.
La Biblia hebrea o Tanaj está dividida en tres
secciones: los cinco libros de Moisés (la Ley o Torá), los libros escritos por
los profetas hebreos (los Profetas o Nevi’im) y unos libros que no entran
en las dos categorías anteriores (las Escrituras o Ketuvim); éstos son
conocidos como hagiógrafa o simplemente «las Escrituras».
La Biblia judía fue escrita predominantemente en
hebreo, pero tiene algunas pequeñas partes que fueron escritas en arameo.
En la Biblia cristiana, la Biblia hebrea es llamada
Antiguo Testamento, para distinguirla del Nuevo Testamento, que es la parte que
narra la vida de Jesús y su predicación, entre otras cosas. El Nuevo Testamento
está dividido en los cuatro Evangelios, Historia (Hechos de los
Apóstoles), las Cartas a iglesias cristianas por Pablo y otros apóstoles, y el
Apocalipsis.
Biblia de Gutenberg.
Las biblias cristianas contienen la totalidad del
Tanaj o Antiguo Testamento, junto con un grupo de Escrituras
posteriores conocidas como el Nuevo Testamento. Dentro del cristianismo,
no hay acuerdo completo sobre el número exacto de libros que debe tener
(con igual reconocimiento) el Antiguo Testamento, es decir, sobre su canon.
Hasta el siglo XVI se mantuvo en Occidente la traducción latina de San
Jerónimo conocida como «la Vulgata» (proveniente del latín vulgar) que
incorporaba tanto el canon judío como aquellos escritos de la Septuaginta
griega. Con la Reforma Protestante, Martín Lutero cuestionó la necesidad
de mantener los libros «apócrifos» junto a los del canon judío y los agrupó
como un apéndice edificante al final de su traducción al alemán de la
Biblia. La Iglesia Católica Romana confirmó, sin embargo, el canon de la Biblia
de los Setenta y de la Vulgata en el Concilio de Trento (1545-1563),
reconociendo más claramente la canonicidad de algunos escrituras
cuestionadas por Lutero, que desde ese mismo siglo comenzaron a ser
llamados «Deuterocanónicos» (Concepto introducido por Sixto de Siena). Las
iglesias orientales también reconocen plena canonicidad a los deuterocanónicos,
agregando también otros libros que se encuentran en códices antiguos, como
III y IV Macabeos y la Oración de Manasés. La Iglesia Ortodoxa Etíope
acepta asimismo el Libro de Enoc como canónico. El Nuevo Testamento hace
referencia tanto a los libros deuterocanónicos como al Libro de Enoc. En
cuanto al resto de los libros, no hay disputa alguna y todos los grupos
cristianos tienen los mismos libros en el Nuevo Testamento de la Biblia.
Cánones bíblicos
Un canon es el conjunto de libros que integran la
Biblia según una tradición religiosa concreta, que los considera así «divinamente inspirados»
y los distingue de otros textos que no se consideran revelados. Estas
diferencias entre las distintas ramas del cristianismo se dan únicamente
para el Antiguo Testamento, ya que todas las Biblias tienen el mismo número de
libros en elNuevo Testamento.
El primer canon es el Pentateuco, el cual se
compone de los libros del Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio
y contiene la «Ley de Dios», que es el conjunto de los 613 preceptos del
Judaísmo. Dentro del Judaísmo surge disputa sobre el canon correcto. Un
grupo religioso, los saduceos, sostiene que solamente conforma el canon de
las Escrituras la Torá o Pentateuco (la Ley), mientras que otros grupos también
consideran las Escrituras de los Nevi’im (Profetas) y los Ketuvim (los Escritos).
Después de la destrucción de Jerusalén en el año 70 d. C., el grupo
judíopredominante fue el de los fariseos, que sí considera al canon como
conformado por la Ley, los Profetas y los Escritos. Así, a finales del
siglo I el Judaísmo estableció en Yamnia (Yavne) como canon de sus libros
sagrados aquellos que cumplieran tres requisitos: que hubiera una copia
del libro en cuestión que se supiera que fue escrito antes del año 300 a. C.
(cuando lahelenización llegó a Palestina, con los problemas culturales y
religiosos subsecuentes, y que pueden leerse en libros como los de los
Macabeos o el de Daniel), que dicha copia estuviera escrita en hebreo o cuando
menos arameo (no griego, la lengua y cultura invasora) y que tuviera un
mensaje considerado como inspirado o dirigido al pueblo de Dios (con lo que
también algunos libros que cumplían las dos características anteriores
tuvieron que salir del canon). En tiempos de Jesús de Nazaret es dominante
la segunda opinión, la cual es sostenida y transmitida por muchos
cristianos hasta tiempos de la Reforma Protestante con la controversia de
los libros deuterocanónicos («Estructura», up supra). Esta controversia
probablemente se originó precisamente por el hecho de que el Judaísmo había
establecido su canon a fines del siglo I, con lo que para ellos ya no
estaban presentes aquellos textos que sólo se encontrarían en griego (en la
versión de la Biblia judía de los Setenta). Estos libros fueron
precisamente los que se considerarían, posteriormente, como deuterocanónicos.
La versión judía de la Biblia consta de 24 libros,
con ciertas diferencias respecto a las Biblias cristianas. Algunas de ellas
son: Los nombres de varios libros: Éxodo para el original Shemot
(«Nombres»); Levítico para Vaikrá («Y llamó»). La subdivisión en
tres secciones: Torá (la Ley, el Pentateuco); Nevi’im, los Profetas Anteriores
(Josué, Jueces, Samuel yReyes) y Posteriores (Isaías, Jeremías, Ezequiel y los
12 profetas menores); y Ketuvim, los Escritos (Salmos, Proverbios, Daniel
y los demás libros).Actualmente, los libros que no son considerados canónicos
por católicos y ortodoxos, reciben el nombre de libros apócrifos; a su
vez, esos mismos libros suelen ser denominados pseudoepígrafos por los
protestantes, que, habitualmente, respetan también el nombre de
Deuterocanónicos (literalmente, «del segundo canon») para aquellos que han
recibido reconocimiento canónico de católicos y ortodoxos (en general, son
libros escritos originalmente en griego, incluidos en la traducción al griego
de la Biblia judía conocida como Septuaginta o de los LXX). No obstante,
algunas corrientes protestantes fundamentalistas insisten en conservar el
nombre de apócrifos para los libros deuterocanónicos. Con todo, hay que
señalar, que los primeros cristianos no usaban la Biblia hebrea, sino que
usaban la Septuaginta o de los LXX por cuanto varios de los nuevos cristianos
fueron judíos de cultura griega, como por ejemplo, Pablo de Tarso, San
Esteban, y los evangelistas San Lucas y San Marcos.
Así pues, las versiones católicas de la Biblia
constan de 73 escritos, en tanto que las versiones protestantes sólo contienen
66, debido a que ellos consideran que siete libros impresos en las
versiones católicas (los deuterocanónicos) sólo son «lectura edificante»,
pero no canónica. Las versiones ortodoxas, por su parte, incluyen 76 libros en
total. Además, la Iglesia Ortodoxa Etíope incluye como canónico en el
Antiguo Testamento el Libro de Enoc, que no incluye ninguna de las otras
corrientes cristianas ni el judaísmo.
Biblia Cristiana
La Biblia es un libro usado para todos los
cristianos, aún cuando no todos los grupos de cristianos la lean asiduamente.
Las Biblias Cristianas están constituidas por escritos hebreos, arameos y
griegos, que han sido retomados de la Biblia griega, llamada Septuaginta,
y del Tanaj hebreo-arameo, y luego reagrupados bajo el nombre de Antiguo
Testamento. A estos se ha sumado una tercera serie de escritos griegos
cristianos agrupados bajo el nombre de Nuevo Testamento. Distintos
grupos cristianos han debatido largamente sobre la inclusión o exclusión
de algunos de los libros de ambos Testamentos, surgiendo los conceptos de
apócrifos y deuterocanónicos para hacer referencia a algunos de estos
textos. La comunidad judía actual reserva la expresión «Biblia Cristiana»
para identificar sólo a los libros que han sido añadidos al Tanaj
hebreo-arameo por el judaísmo tardío helenizante alejandrino, y luego por el
cristianismo, y evita referirse a su Tanaj en términos de «Biblia», o de
«Antiguo Testamento». Varias denominaciones cristianas incorporan otros libros
en el Canon de ambos Testamentos.
El Antiguo Testamento
El Antiguo Testamento es la colección de libros
escritos antes de la vida de Jesús, pero aceptada por los cristianos como
parte de la Sagrada Escritura. En términos generales, es la misma que la
Biblia hebrea, sin embargo, divide y ordena de manera diferente, y varía
desde el judaísmo en la interpretación y énfasis. (Véase, por ejemplo, Isaías
7:14.)
El Nuevo Testamento
El Nuevo Testamento es una colección de 27 libros,
representativos de 5 diferentes géneros literarios judeocristianos: 4
Evangelios, 1 Libro de Hechos, 20 Epístolas, 1 Apocalipsis, y 2 Tratados
Doctrinales (éste último es el verdadero género al que pertenecen Hebreos
y I Juan). La figura protagónica es Jesús de Nazaret, llamado Cristo. Casi
todos los cristianos, con algunas excepciones, como el cristianismo
gnóstico de los primeros siglos, han venido asumiendo el Nuevo Testamento como
un texto sagradodivinamente inspirado.
Conservación e integridad de
la Biblia
No obstante las objeciones de algunos críticos,
existen pruebas que avalan la afirmación de que gran parte de la Biblia se
ha conservado sin cambios importantes hasta nuestros días. Quienes no
están de acuerdo con estas afirmaciones apelan a circunstancias tales como
traducciones de un idioma a otro, copiado de manuscritos, opiniones divergentes
en dogmas y/odestrucción deliberada, la Biblia no ha llegado como un volumen
completo. Hallazgos tales como los manuscritos del Mar Muerto han mostrado
que, en gran parte, esto sucedió antes del Siglo I de nuestra era, aunque los
textos encontrados allí, y los conocidos hasta entonces, parecen presentar
cambios menores.
Ha habido otros textos relevantes relacionados con
la Biblia «original», los escritos apócrifos hallados en Egipto (Nag
Hamadi), Palestina (Qumrán, en el Mar Muerto), e incluso en países muy
lejanos hacia el Sur y el Oriente. Estos han supuesto una
nueva interrogante acerca de si ya estaría completo el canon bíblico, o
habría que revisarlo de forma detallada.
Los defensores de la idea de que las escrituras
bíblicas son fieles y están completas, se basan en la cantidad de
copias idénticas que, desde tiempos remotos, se ha realizado de las
mismas. Los copistas hebreos de las Escrituras fueron muy instruidos, los
masoretas, que copiaron las Escrituras Hebreas entre los siglos VI y X solían
contar las letras para evitar errores. El erudito en la materia W.H. Green
dice sobre las comparaciones entre textos antiguos y modernos lo
siguiente: Se puede decir sin temor a equivocarse que ninguna otra obra
de la antigüedad se ha transmitido con tanta exactitud.
Arqueología y coincidencias
bíblicas
Las investigaciones arqueológicas en la zona donde
se desarrollan los hechos narrados en la Biblia tienen como un
resultado añadido la comprobación de los hechos, lugares y personajes que
aparecen citados en los diferentes libros que componen la Biblia. Incluso
se ha llegado a crear el término de arqueología bíblica para denominar a una
parte de la arqueología que se encarga de estudiar los lugares indicados
en la Biblia.
Hay varios casos en que los descubrimientos
arqueológicos han confirmado los hechos o personajes bíblicos. Entre
esos descubrimientos se encuentran los siguientes:
• Destrucción de Jerusalén
en el año 70. En 1970 el equipo de arqueólogos a las órdenes de Nahman Avigad
descubrió en Jerusalén las ruinas de una casa quemada en la cual se
hallaron unas monedas que situaban el escenario alrededor del año 70. La
disposición de los objetos hallados así como el hallazgo de los restos de un
cuerpo en disposición de huida dieron pie a la hipótesis que se debía a la
destrucción de Jerusalén por las tropas romanas en el año 70, destrucción que
figura como profecía realizada por Jesús en Lucas 19:43,44.
• Otra posible interpretación, dada
por los partidarios de la datación tardía de este evangelio, sostiene que dicho
Evangelio fue escrito con posterioridad a la destrucción y por tanto
relata hechos ya sucedidos.
• Rey Sargón II de Asiria. Este
personaje que aparece en Isaías 20:1 no pudo ser confirmado hasta que en 1843
se descubrieron las ruinas de su palacio. Se hallaron escritos en los que
se relatan las conquistas de las ciudades de Samaria y Asdod que aparecen
también relatados en el libro de Isaías.
• Joaquín, rey de Judá. El
descubrimiento de las tablillas de Babilonia permitió la confirmación de la
existencia del rey Joaquín de Judá y sus cinco hijos que aparecían
nombrados en los libros de 2ª de Reyes y 1ª de Crónicas.
• El sello de Yehujal. En 2005
la arqueóloga Eilat Mazar descubrió un sello de arcilla en el cual se nombraba
Yehujal (Jehucal o Jucal) que fue un funcionario judío que es nombrado en
el libro de Jeremías.
• Hallazgos en Nínive. En las
excavaciones realizadas en la antigua ciudad de Nínive, capital de Asiria, se
han hallado varias piezas que confirman relatos bíblicos. En el palacio de
Senaquerib hay un bajorrelieve que muestra a las tropas asirias llevando
cautivos a los israelitas tras la caída de Lakís, hecho relatado en el Segundo
Libro de los Reyes. En las piezas conocidas como Anales de
Senaquerib se relatan los hechos realizados durante el reinado de
Ezequías y a este mismo personaje. También es curioso como en el listado
de ciudades conquistadas por los asirios no aparece Jerusalén lo
cual concuerda con el relato bíblico de que fueron derrotados a sus
puertas, al igual que se relata el asesinato de Senaquerib que están
incluidos en el Libro de Isaías.
• El Cilindro de Ciro. Se encontró en
Sippar cerca de Bagdad, Iraq. Narra la conquista de Babilonia por Ciro el
Grande.
Algunos ven en el relato de Isaías 13:1, 17-19 e
Isaías 44:26-45:3 la profecía de la destrucción de Babilonia por Ciro.
También en el cilindro se expone la política de Ciro de dejar volver a los
pueblos deportados a su tierra de origen, tal y como sucedió con los
israelitas.
• Recientemente se encontró al
sur de Siria una piedra con la Estrella de David grabada en la zona que la
Biblia indica estuvo la ciudad hebrea de Dan antes de la conquista asiria,
lo que puede indicar que fue territorio hebreo o tenía algún contacto con
Israel.
La formación del canon.
El término canon originalmente significaba una vara
y luego una regla para medir, luego llegó a significar una regla o
norma. Cuando hablamos del canon del Nuevo Testamento queremos decir la
lista autorizada de los escritos cristianos que la iglesia ha
aceptado como escritos que fueron inspirados divinamente. Hay 27 libros en el
Canon del Nuevo Testamento. A otros escritos de ese periodo cristiano se
les llamaba «escritos no canónicos».
1. Los principios de un canon.
A. La colección de los libros. El primer paso en la
formación de un canon tuvo que ser la colección de los libros que
habían sido escritos. Probablemente la primera colección consistió en las
epístolas de Pablo. El profesor Goodspeed opina que la aparición de Hechos
causó que algún admirador de Pablo se diera «o iniciara» al importante proyecto
de reunir las cartas del gran apóstol. Por ejemplo, podemos imaginar que
alguien en Colosas empezara con la carta a esa iglesia en esa ciudad,
así con la nota personal a Filemón, en cuya casa se congregaba la iglesia.
No lejos de allí en Efeso encontraría otra epístola y en la Europa
continental encontraría una epístola en Filipo, dos en Tesalónica y una en
Corinto. Siguiendo su viaje hasta llegar a Roma obtendría la carta muy
importante que Pablo envió a los cristianos en esa ciudad. De regreso en Asia
Menor buscaría la carta escritas a las iglesias en la provincia de
Galacia. En Efeso también habría encontrado las dos cartas a Timoteo, y en
Creta la que Pablo le envió a Tito. Así habría reunido las trece epístolas
de Pablo. Claro que la colección de los cuatro evangelios no pudo haberse
hecho sino hasta después de haber escrito el evangelio de Juan, casi al fin del
primer siglo. Pero tal colecciónprobablemente se hizo en los primeros 25 años
del segundo siglo. Efeso habría sido el lugar más lógico para reunir
los evangelios dado que Juan escribió el último de ellos en esa ciudad. También
es posible que en Asia Menor haya sido el lugar donde el resto de los
libros de Nuevo Testamento fue coleccionado por primera vez.
B. Los primeros volúmenes
encuadernados. Probablemente cada uno de los libros del
Nuevo Testamente fue escrito en un rollo de papiro, o pergamino. Hasta
fechas recientes los eruditos habían dado por sentao que estos
pergaminos circularon separadamente durante los primeros 300 años. La
razón de ello es que los primeros volúmenes encuadernados de la Biblia griega
data del siglo cuarto. Pero hace aproximadamente 25 años se hizo un
descubrimiento importante que cambió esta opinión. Unos eruditos
encontraron muchas hojas de un volumen de papiro, encuadernado, de las
epístolas de Pablo y también hojas de otros volúmenes que contenían los
cuatro evangelios. Ambos volúmenes datan del siglo tercero. Parece obvio
que el Nuevo Testamento circuló en el tercer siglo -y también probablemente en
el segundo- en cuatro volúmenes. Los evangelios formaban uno, las
epístolas de Pablo el segundo, las epístolas generales el tercero y Apocalipsis
el cuarto. Hechos venia algunas veces con los evangelios y a veces con las
epístolas generales. En nuestros primeros manuscritos griegos
está relacionado estrechamente con estas últimas. Esta es la razón por la
que las epístolas generales vienen después de Hechos en el testamento en
griego de Wescott y Hort.
2. Razones de la formación del
canon.
Al principio la iglesia no vio la necesidad de
decidir cuales escritos cristianos debían ser aceptados como los que
tenían autoridad. Pero pronto se suscitaron situaciones que recalcaron la
necesidad de hacer una diferencia entre los libros que se aceptaban
divinamente inspirados y los que no se consideraban así. Por ende, gradualmente
fue apareciendo el concepto deun canon del Nuevo Testamento.
A. El canon de Marción. Alrededor
de la mitad del segundo siglo vivió en Roma un hombre llamado Marción.
Aparentemente había aceptado las enseñanzas de los gnósticos, de que toda
la materia es mala y todo espíritu es bueno. Esto lo llevó la rechazar el
Antiguo Testamento con su historia de la creación, y a postular que el Dios del
Antiguo Testamento no es el sersupremo verdadero. Lo que es mas, de los
escritos del Nuevo Testamento aceptaba solo el evangelio de Lucas y diez
epístolas de Pablo «excluyendo las pastorales». Puesto que los dos
primeros capítulos de Lucas describen el nacimiento humano de Jesús, los
eliminó del evangelio. Debido a que Marcion era un hombre de gran influencia,
la iglesia se vio en la necesidad de confrontar el canon limitado de él
con uno más completo y más correcto. Los eruditos generalmente están de acuerdo
en que esta acción fue uno de los primeros factores que causó que los
líderes cristianos le dieran atención al asunto de un canon ortodoxo.
B. Uso de los libros
Apócrifos. Aun en el seno de la cristiandad ortodoxa había diferencia de
opinión en cuanto a algunos libros. La iglesia de Alejandría, Egipto, fue
constante en su actitud generosa hacia el asunto de la canonicidad. Libros
apócrifos tales como la primera epístola de Clemente a los Corintios, el
Didache, la epístola de Bernabé, y el Pastor de Hermas fueron aceptados
ampliamente y usados en las iglesias orientales, como escrituras santas. De
hecho, los dos últimos se encuentran al final del gran manuscrito del
siglo cuarto, el Sinaitico, y la primera epístola de Clemente esta al fin del
manuscrito Alejandrino del «siglo quinto», que es uno de los tres
manuscritos griegos mas antiguos en existencia. El otro manuscrito del siglo
cuarto, el Vaticano, carece de su última parte, fue suficientemente serio
que eruditos sobresalientes como Clemente de Alejandría «alrededor del año
195» y Orígenes «alrededor del año 220» hayan citado esos libros como si fueran
escrituras inspiradas.
Pero el problema verdaderamente se volvió agudo
cuando los escritores heréticos participaron a usar ciertos libros apócrifos
en sostén de sus ideas erróneas. Puede verse fácilmente que la iglesia
tuvo que decidir cuales libros serian aceptados como autorizados para la
formación de la teología, y cuales habían de ser excluidos. Este proceso de
canonización continuó durante los siglos segundo, tercero y cuarto.
C. Edicto de Diocleciano. En el
año 303 el emperador Dioclesiano dio un edicto decretando que debían quemarse
todos los escritos sagrados de los cristianos. Eso suscitó la pregunta:
¿Por qué libros debía uno arriesgar su vida? Los cristianos
tuvieron que decidir si era prudente ser un mártir por poseer un
ejemplar del Pastor de Hermas, por ejemplo, si el libro realmente no
era parte de las Santas Escrituras. De modo que la persecución tuvo parte
el acelerar la formación de un canon del Nuevo Testamento.
3. Medidas de la canonicidad.
El Dr. Thiesen ha dado un buen resumen de los
factores involucrados en determinar si un libro debe ser aceptado o
rechazado como santas escrituras. Da una medida de cuatro pruebas o medias
de canonicidad que son.
A. Apostolicidad. ¿Fue
el libro escrito por un apóstol, o cuando menos bajo la influencia directa de
un apóstol? En lo que toca a los evangelios, se aceptarían como
composiciones de los apóstoles de ese nombre. La tradición más temprana de la
iglesia conectaba el evangelio de Marcos con Pedro y el de Lucas con
Pablo. Parece probable que esta haya sido la prueba o medida que se le aplicó
a cada uno de los 27 libros de nuestro Nuevo Testamento.
B. Contenido. ¿Era
el contenido del libro indudablemente de elevado carácter espiritual? Es
probable que los libros apócrifos fueran eliminados uno por uno sobre la
base de esta pregunta. Cualquier persona puede hoy leer estos libros cristianos
nocanónicos y ver por si misma el juicio de la Iglesia Primitiva, guiada
por el Espíritu Santo. En la mayoría de los casos, elcontraste entre los libros
canónicos y los apócrifos es tan notable que no deja lugar alguno para dudas.
C. Universalidad. ¿Fue
el libro recibido universalmente en toda la iglesia? Algunos libros apócrifos
que habían sido aceptados en el oriente fueron eliminados por esta razón,
de que habían sido rechazados en el oeste. Libros disputados como la
epístola a los Hebreos fueron canonizados cabalmente porque todas las
secciones de la iglesia los aceptó al final.
D. Inspiración. Claro
que la última prueba fue la inspiración. Solo esos libros que dieron evidencia
adecuada de haber sido inspirados divinamente lograron admisión al canon.
Sin duda alguna el Espíritu Santo guió a la Iglesia Primitiva a
seleccionar esos mismos libros que había inspirado.
4. Historia del canon.
Los escritores de la primera parte del segundo
siglo como Ignacio y Policarpo citan frecuentemente a muchos de los libros
del Nuevo Testamento. Justino Mártir alrededor del año 150 hace alusión a
14 de nuestros 27 libros. Al fin de ese siglo Ireneo, Clemente de
Alejandría y Tertuliano Exhiben un conocimiento de casi todo el Nuevo
Testamento. El canon Muratori alrededor del año 200. En el tercer siglo,
Orígenes clasificó los libros del Nuevo testamento en dos categorías: Los
reconocidos y losdisputados. En el segundo grupo colocó a Santiago, II Pedro,
II y III Juan, y Judas. En esta clasificación lo siguió Eusebio, autor de
la primera gran Historia de la Iglesia (326 D.C.). En aquel tiempo también se
disputaba la clasificación de Hebreos y Apocalipsis, la primera en el
oeste y la segunda en el este. Finalmente, al fin del siglo cuarto, el
concilio de Cartago (397 D.C.), decidió oficialmente los límites del canon del
Nuevo Testamento, adoptando oficialmente nuestros 27 libros. Todos los
demás quedaron fuera del canon, y se prohibió su uso en las iglesias.
Manuscritos
Existen casi cuatro mil manuscritos griegos del
Nuevo Testamento, se pueden dividir en tres clases principales: papiro,
unciales, y minúsculas.
a. Papiro. La
mayoría de los manuscritos importantes en papiro han sido descubiertos de 1930
hasta esta fecha. De modo que esta fase de la crítica textual es
totalmente nueva.
Se conocen alrededor de 53 fragmentos del Nuevo
Testamento. Los más importantes son los papiros «Chester Beatty» de origen
ingles, quien tuvo la dicha de obtener algunos pliegos antiguos de papiro de
Egipto a fines de 1930 y principios de 1931.
En la antigüedad los rollos de papiro eran el
vehículo más importante para transmitir y conservar el conocimiento humano,
pero no solo se empleaba para la escritura, sino que también se usaba la
planta de papiro para construir barcas y con su corteza se construían las
velas de navío.
Nuestros primeros manuscritos de piel datan del
siglo IV. Estos fueron formados de piel de animales, las cuales eran
convertidas en hojas finas y lisas a través de un minucioso proceso.
La tarea de los papirólogos consiste en estudiar
todos los textos antiguos, como descubrir, conservar, identificar y publicar
los manuscritos antiguos. A pesar del nombre que les ocupa (Papirología)
también se encargan del estudio de textos antiguos en pergaminos, vitela,
cuero y otros materiales.
b. Unciales. La
palabra uncial «significa literalmente de una pulgada de alto». Así se llaman a
estos manuscritos porque están escritos en letras grandes y cuadradas. El
material es vellón (piel de un ovino) y datan del cuarto al décimo siglo. De
este tipo de material existen todavía alrededor de doscientos manuscritos
y los dos mas antiguos son el Vaticanus y elSinaiticus que datan
del siglo IV.
c. Minúsculas. De estos manuscritos hay alrededor
de 2,400 que los eruditos conocen. Ya que datan del fin de la edad media o
sea del siglo noveno al siglo decimoquinto, los cuales tienen mucho menos valor
que los unciales. A las minúsculas también se les llama «cursivas» por
estar escritas en un estilo de ese tipo, con palabras tras palabras, letras que
frecuentemente están juntas.
A veces se oye que hay «miles de lecturas
alternativas o diferentes en los manuscritos griegos del Nuevo
Testamento». Técnicamente es verdad. Pero en la realidad, la vasta mayoría
de esas variaciones no tienen importancia alguna, puesto que las
diferencias son nada más asuntos de ortografía o de forma gramatical. Las
variaciones verdaderamente significativas llegan solamente a una milésima
parte de todo el texto. En las palabras de Hort vemos; y ninguna de esas
variaciones afectaadversamente asuntos de doctrina. Puesto que tenemos
alrededor de 4,000 manuscritos del Nuevo Testamento griego, completos o en
partes, no necesitamos sentir la más mínima inquietud en cuanto a si poseemos
un texto básicamente fidedigno que se aproxima sumamente al original
exacto.
CÓDICE SINAÍTICO (siglo IV dC)
El códice sinaítico fue descubierto en 1848. Este
descubrimiento fue, se podría decir; casi una casualidad; aunque
muchos pueden decir que las casualidades no existen, pero gracias a un
joven alemán llamado Tischendorf es que hoy poseemos este maravilloso
documento al alcance de los traductores que buscan un texto más exacto al
original. Es por medio de estos códices que ahora tenemos una Biblia mas confiable,
por tener la evidencia palpable de su origen como lo son las lenguas
originales.Tischendorf fue al convento de Santa Catalina y en ese momento se
estaban destruyendo viejos escritos que aparentemente eran inservibles,
Tischendorf se dio cuenta de que entre esos documentos se encontraban varios de
los escritos sagrados en una cesta listos para quemarlos y es así como
Tischendorf logró que se le permitiera obtenerlos. En esta primera ocasión
logró salvar solo parte de ellos, aunque en sus siguientes viajes logró
conseguir que varias de otras copias le fueran permitidas para su
traducción. En esta ocasión Tischendorf logró retirar de la cesta 43 hojas
de este códice, mientras losmonjes le contaban que momentos antes de su
llegada habían quemado dos cestas iguales. Momentos más tarde cuando le
mostraron otras porciones del mismo códice se dio cuenta de que contenía
todo el libro de Isaías y el cuarto libro de Macabeos. Tischendorf advirtió a
los monjes que tales documentos eran muy valiosos para ser quemados al
fuego. Las 43 hojas que logró retener contenían porciones del primer libro
de Crónicas, Jeremías, Nehemías y Ester. Tischendorf hizo una publicación en
1846, nombrando los documentos como el códice Federico Augustanus.
La traducción de este códice dio inicio en el Cairo
por dos alemanes; uno de ellos era farmacéutico y el otro era
bibliotecario. Estos hombres tenían conocimiento del griego, claro que
ellos estaban bajo la supervisión de Tischendorf. El trabajo era traducir
las 110.000 líneas del texto, dicho trabajo se terminó en dos meses. La
etapa próxima se convirtió en una diplomacia eclesial. El cargo de mayor
autoridad se hallaba vacante para ese entonces.Tischendorf sugirió que sería
provechoso para ellos hacer un regalo al Zar de Rusia, personaje de mucha
influencia que ellos querían como protector de la iglesia griega.
Después de largas negociaciones el tan valioso
códice fue entregado a Tischendorf para su ublicación en Leipzig y
para presentarlo al Zar en nombre de los monjes. La publicación definitiva
del códice fue hecha en el siglo XX por la Universidad de Oxford.
Luego de la revolución rusa, al no estar interesada
la Unión Soviética en la Biblia, y por necesidades económicas,
negociaron su venta con los encargados del museo Británico por 100.000
Libras Esterlinas, cantidades que fue pagadas por el gobierno inglés y una
suscripción popular, de individuos y congregación en Inglaterra y Estados
Unidos. Al finalizar el año 1933, el manuscrito fue depositado en el Museo
de Londres, donde permanece hasta hoy. Este códice «Sinaítico» y el Códice del
«Vaticano» son los que mas se han usado para la verificación y actualización
del textode hoy.
CÓDICE ALEJANDRINO (siglo V
dC)
El códice Alejandrino fue copiado en Egipto y se
sabe que desde 1098 fue propiedad del patriarca de Alejandría y fue levado
a Londres en 1628. El códice alejandrino contiene el Antiguo Testamento
pero con varias lagunas, ya que le faltan varias partes de los evangelios
como: Juan 6:50, 8:52 y 2Co. 4:13-12; 6.
Este códice contiene la epístola de San Clemente de
Roma.
CÓDICE VATICANO (siglo IV dC)
El códice del Vaticano data del siglo IV, y es
seguramente el más importante. Contiene toda la Biblia (el Antiguo Testamento
y también Nuevo Testamento) aunque, tiene algunas lagunas como ejemplo
podemos citar el libro histórico de los Hechos. Este libro contiene solo
nueve capítulos. El origen de éste códice no se sabe a ciencia cierta, la mayor
parte de los eruditos sitúa suorigen en Egipto o Alejandría, por su puesto hay
otros que lo ubican en Cesarea. La tinta del texto ha sido reforzada
posiblemente en el siglo X El que realizó este trabajo tuvo cuidado de no
reforzar el texto que accidentalmente había sido copiado dos veces por el
copista original. Las páginas de este códice miden aproximadamente 27x27
centímetros, pero originalmente pudieron ser más grandes. El texto está
escrito en tres columnas de escritura continua. La escritura contiene acentos
posiblemente añadidos en el siglo X o XI. Este códice fue depositado en la
Biblioteca del Vaticano en el año 1475 - 1487.
Actualmente se conservan 591 páginas del Antiguo
Testamento y 142 del Nuevo Testamento. El texto del códice del Vaticano ha
sido objeto de varias correcciones, su comienzo y su final es un poco
defectuoso por su antigüedad.
CÓDICE DE BEZA (siglo IV-V dC)
Este manuscrito se conservó en el convento de San
Irineo de Lyon, Francia por más de mil años. Este manuscrito fue
entregado en manos de Teodoro Beza en el año 1562 por causa de las guerras
de religión; Teodoro Beza sucesor de Calvino sacó este importante
manuscrito de dicho convento y lo regaló a la Universidad de Cambridge en el
año 1581. Esta la razón por la que este códice lleva el nombre de Beza.
El códice Beza es un manuscrito bilingüe
griego-latín que contiene los cuatro Evangelios. Los Hechos de los apóstoles y
parte de las cartas de Juan. El orden de los Evangelios es: Mateo, Juan,
Lucas y Marcos.
Según los traductores especialistas, el traductor
que a principios del siglo V copió el códice Beza debió efectuar su
trabajo usando un documento mucho más antiguo que podría remontarse a
mediados del siglo II. El traductor transcribe el griego según una
fonética poco corriente en su época, conservando la ortografía primitiva para
respetar el original. Si eso fuera así, el códice nos ofrecería una
versión muy antigua de los evangelios.
Este códice es especialmente importante porque
contiene una variante de los Hechos de los Apóstoles que es hasta un
10% más extensa que el texto llamado alejandrino, que es el que suele parecer
en las Biblias. El texto del códice de Beza es el que se llama texto
occidental de los Hechos que es, como ya se ha dicho, mas largo. También
contiene un texto del evangelio deLucas distinto de los otros códices.
CÓDICE WASHINGTONIANO (siglo V
dC)
Este importante códice es datado del siglo V y fue
comprado por Charles L. Freer, de Detroit en 1906. Actualmente se
conserva en el museo de Smithsonian Intitution de Washington. El orden de
los evangelios contenidos en este códice es: Mateo, Juan, Lucas y Marcos,
este orden se le conoce como: occidental.
CÓDICE DE EFREN (siglo V dC)
Este códice se conserva en la Biblioteca Nacional
de Paris. El manuscrito original fue raspado y sobre él se escribió una
obra de San Efrén en el siglo XII. Tischendorf se atrevió con
procedimientos químicos a leer 145 hojas de este códice, que pertenecen al
Nuevo Testamento. También contienen muchas lagunas.
Texto Masorético
Existe un grupo de manuscritos del Antiguo
Testamento, que fue publicada a mitad del siglo XIX. Estos manuscritos
son conocidos bajo el nombre de «Texto Masorético»; muchos de esos
fragmentos literarios se encuentran en varios lugares principalmente en
Cambridge y Leningrado. Estos manuscritos poseen muchos textos bíblicos lo cual
ayuda a seguir con undetalle mejor el trabajo de los Masoretas.
Los manuscritos masoréticos más antiguos pertenecen
al periodo aproximado del año 900 d.C. Un códice de los profetas, que es
un manuscrito en forma de libro; o sea (distinto a un rollo) que pertenece a la
sinagoga de Qaraite, el Cairo, fue completado en 895; un códice del
Pentateuco en el museo británico. En 1948 existía en la sinagoga de Alepo un
códice de toda la Biblia Hebrea escrita al principio del siglo X que por
la lucha entre judíos y árabes de 1948, que como resultado fue el
establecimiento de Israel como nación, se perdió y se temía que hubiera
sido destruido. Pero diez años mas tarde se anunció que se habíaencontrado;
había perdido la mayor parte del Pentateuco y había sufrido daños
considerables. Actualmente se conoce la Biblia Hebraica con el nombre de
Stuttgartensia, una Biblia en Hebreo que presenta un manuscrito del Siglo XI
conocido también como Leningradense. Este es un texto masorético usado
como base para revisiones modernas. La última versión hebraica mencionada
incluye notas acerca de ketiv que significa «escrito» y se refiere al texto
consonántico y también notas acerca del Qere que significa «léase». La
Stuttgartensia incluye variantes de otros manuscritos hebreos, incluyendo los
rollos del Mar Muerto, y de las versiones antiguas. Las notas de esta Biblia
hebraica son también registradas por los mismos masoretas.
Estas traducciones y manuscritos a veces son mucho
mas antiguos que los documentos hebreos accesibles hoy día, al
mismo tiempo pueden reflejar una traducción más cercana a los originales.
La Septuaginta
Fue en el reinado de Ptolomeo Filadelfo (285 a 246
a.C.), que se confeccionó la Septuaginta, versión griega del
Antiguo Testamento. Demetrio el bibliotecario sugirió a Ptolomeo que consiguiera
una traducción cuidadosa de los escritos y que fueran los judíos mismos
quienes hicieran la traducción. Ptolomeo Filadelfo escribió a Eleazar, el
sumo sacerdote de los judíos para que se emprendiera la traducción. El sumo
sacerdote mandó seis hombres de cada tribu, expertos en el conocimiento de
los escritos en cuestión. Debe su nombre a que, según la
tradición, fueron 72 judíos los que trabajaron
logrando así, completar la famosa versión de la Septauginta en solo 72
días. Cuando terminaron el trabajo, leyeron la traducción aprobándola
unánimemente.
Esta traducción satisfacía la necesidad de la
población judía que hablaban griego y que deseaban tener las Escrituras,
al mismo tiempo poder mantenerse alejados de la degradante influencia
helenista.
La Septuaginta era la traducción que circulaba
ampliamente durante la época de Jesucristo y entre los judíos de la
dispersión en el mundo mediterráneo. Esta fue al mismo tiempo la Biblia
que usaron los apóstoles de la iglesia del principio.
Fue el instrumento más importante en las manos de
los primeros misioneros, pues el griego era el lenguaje que se entendía
por todo el imperio romano.
Vulgata Latina
La Vulgata Latina de San Jerónimo fue escrita entre
el año 382 al 404 d.C.
La mayor parte de los cristianos usaban la LXX
(Septuaginta) como base para el Antiguo Testamento; hasta
aproximadamente el siglo cuarto. Por supuesto, también había una
considerable cantidad de literatura que se consideraba escritura inspirada
y los primeros concilios de la Iglesia se ocuparon en gran parte de este
asunto. La idea era saber a fondo lo que verdaderamente constituían las
escrituras.
La Vulgata latina se convirtió en la traducción
oficial de la iglesia católica gracias al arduo trabajo de San Jerónimo. Al
principio san Jerónimo no quería incluir los libros deuterocanonicos en su
famosa traducción; este hombre tenía conocimiento del canon hebreo que se
había desarrollado y sabía que esos libros no tenían las palabras, inspiración;
y no eran aceptación por la iglesia y por los judíos. Además no eran
aceptados como divinos y no estaban incluidos en el canon hebreo.
Fue por orden de san
Agustín contemporáneo de san Jerónimo que quiso incluirlos en la nueva
traducción de la Vulgata, después de conferenciar con el papa Dámaso y sabiendo
que la gran parte de la gente estaba a favor de Agustín, Jerónimo decidió
incluir los libros Deuterocanonicos en esta traducción. Es importante saber que
san Jerónimo no era bien aceptado enla antigua capital de Roma lo que también
influyó que estos libros ya mencionados fueran agregados en esta versión.
La Vulgata se convirtió en la obra
oficial de la iglesia católica por muchos siglos, aun hoy se utiliza, pero ya
no con la misma fuerza e importancia, ya que han surgido nuevas versiones
católicas que abandonaron la tradición de usar como base de traducción la
Vulgata. Ahora existen muy buenas obras católicas como la Biblia de Jerusalén,
la Biblia Nácar-Colunga por mencionar algunas.
Biblia Alfonsina
La Biblia Alfonsina fue publicada en
1260.
Esta Biblia fue la primera obra
traducida al castellano, la cual contiene todo el Antiguo Testamento, y fue
traducida de la Vulgata. Fue hecha en 1260 por orden del rey Alfonso X el
sabio.
Biblia de
Wycliffe
La primera Biblia completa en inglés
fue publicada por John Wycliffe (su nombre se escribe de doce maneras
diferentes). El Nuevo Testamento apareció en 1382. Y la Biblia completa
dos años más tarde (1384). Wycliffe tradujo su Biblia de la Vulgata
Latina. No de los manuscritos originales Hebreo y Griego, pero realizó un
tremendo servicio colocando la palabra de Dios en las manos del pueblo.
Las copias eran hechas a mano, por eso eran pocas y muy caras. Hoy día
existen aproximadamente 170 copias.
El arzobispo Arundel dijo de
Wycliffe: «Ese miserable y pestilente individuo de dañina memoria, hijo
de la antigua serpiente, y verdadero heraldo e hijo del anticristo...
quien coronó sus impiedades traduciendo las Escrituras en la lengua materna».
El arzobispo prohibió a todos a leer la Biblia de Wycliffe bajo la pena de
prisión. Aunque parezca extraño, se le permitió a Wycliffemorir de muerte
natural. Pero mas tarde, en 1428, sus huesos fueron desenterrados y quemados, y
las cenizas arrojadas al río Swift.
Biblia de
Ginebra
La Biblia de Ginebra fue publicada en
1560.
Durante el reinado de «María la
Sanguinaria» muchos protestantes tuvieron que huir a Ginebra, Suiza. Allí
ocuparon su tiempo provechosamente haciendo una nueva traducción entera de
la Biblia, usando los originales hebreo y griego. Fue una obra monumental,
que de inmediato captó el interés, y llegó a ser la Biblia más apreciada del
pueblo de Escocia e Inglaterra. Los peregrinos y los puritanos la llevaron
a América, y por mucho tiempo gozó de preferencia sobre la versión autorizada
del rey Jaime, que recién estaba siendo publicada
Biblia de Reims
La Biblia de Reims fue publicada en
1582.
En un esfuerzo para ganar a
Inglaterra para el papado, los católicos publicaron una versión inglesa del
Nuevo Testamento en Reims, Francia, en 1582. El Antiguo Testamento fue
publicado en Douai, en 1609. En muchos puntos de esta obra puede notarse
su carácter excesivamente latino. En Filipenses 2:7, donde la versión del rey
Jaime dice: «se despojó a si mismo» y la versión popular «dejó a un lado
lo que era suyo», la versión de Reims dice: «se exinanitó a si mismo».
Obviamente, una traducción así es de muy poca ayuda para iluminar la mente
del pueblo.
Biblia de
Casiodoro de Reina
La Biblia de Casiodoro de Reina;
conocida como la Biblia del Oso fue publicada en Basilea, Suiza el 28 de
Setiembre de 1569. Esta obra tiene la figura de un oso en la portada que
está parado junto a un árbol. Esta Biblia está vertida directamente de los
textos originales hebreo y griego. Ha sido tan aceptada por el pueblo
cristiano de habla castellana que hasta hoy sigue siendo la favorita dentro del
pueblo de Dios por casi cuatro siglos. Y esta Biblia es la que Dios mismo
ha utilizado para ganar más almas que cualquier otra versión.
Cada año se distribuyen en América
Latina más de 20 millones de Biblias basadas en esta maravillosa traducción.
Esta obra ha sido sometida a muchas
revisiones como la del señor Valera amigo de Reina quien hizo la primera
revisión y luego muchas otras. La última en 1995 por Sociedades Bíblicas
Unidas. Actualmente se conoce como la Biblia Reina-Valera.
Casiodoro de Reina nació en Sevilla
España en 1519 0 1520 y estudió para sacerdote y se convirtió en un predicador
del evangelio. A causa del evangelio se vio obligado a huir de su tierra
natal y se estableció en Ginebra y luego se dirigió a Francfort Alemania.
El deseo de dar a conocer el evangelio a sus compatriotas hizo que empleara
doce años para traducir las Sagradas Escrituras al castellano. Dicho proyecto
lo terminó en 1567, como ya mencionamos, esta maravillosa obra la publicó en
1569.
Biblia del Rey
Jaime
En 1604, el rey Jaime I de
Inglaterra, dio su autorización para que se hiciera una nueva versión inglesa
de la Biblia. Nombró a 54 eruditos para que hicieran el trabajo, aunque
solo conocemos de ellos 47 nombres. Estos hombres trabajaron en 6
grupos: dos en Wetsminster, dos en Cambridge y dos en Oxford. El proyecto
fue activado oficialmente en 1607 y completado en 1611.
La versión del rey Jaime fue
específicamente una revisión de la Biblia de los Obispos, la cual tenía que ser
«alterada tan poco como la fidelidad al original pudiera permitir». Este
hecho es responsable de las partes menos satisfactorias de esta
versión. Pero la nueva versión era un adelanto tan grande sobre la Biblia
de los Obispos que terminó por reemplazarla rápidamente. No obstante, el
uso que hacemos de «perdónanos nuestras transgresiones» en lugar de «nuestras
deudas», en la oración delPentateuco, es una concesión a la versión más
antigua, la cual ha sido retenida en el ritual de muchas iglesias.
A despechos de sus defectos, es una
versión majestuosa, y ha sido la favorita del pueblo inglés por más de tres
siglos. Está tan profundamente entretejida en la literatura inglesa, que
ser ignorante de esta versión es ser ignorante de la literatura y de
toda la cultura. Nadie puede leer inteligentemente la literatura inglesa
de los últimos tres siglos si es ignorante del texto de esta versión.
Aunque Shakespeare, por supuesto, citó la Escritura basándose en otras
versiones, todos los escritores han usado laversión del rey Jaime.
Felipe Scio de
San Miguel
La Biblia de Felipe Scio de San
Miguel fue publicada en 1793. Esta Biblia tambien es una de las primeras
versiones católicas que tambien fue traducida de la Vulgata Latina. Todas
estas obras aunque fueron completas nunca pueden superar la
obra majestuosa de Casiodoro de Reina y Cipriano de Valera.
Versión
Americana Standard
Algunos eruditos americanos fueron
invitados para unirse al comité inglés de traductores. Cuando se publicó la
versión revisada inglesa, las preferencias de los traductores americanos
se colocaron en un apéndice. Los americanos convinieron en no publicar una
versión de la Biblia por separado, hasta catorce años después que apareciera la
versión completa de la Biblia, en Inglaterra, en el año de 1885. Sin
embargo en 1901 se publicó la Versión Americana Standard que incorporaba todas
las preferencias señaladas por los eruditos americanos. Esta versión nunca
ha sido aceptada por el pueblo común. Pero como de todos modos es una traducción mucho
más fiel al griego original, debido a los nuevos manuscritos descubiertos, es
muy usada para propósitos de estudios.
Muchos eruditos afirman que es la
mejor Biblia de estudio en el idioma inglés.
Biblia Nácar
Colunga
La Biblia Nácar-Colunga es otro resultado
del nuevo enfoque bíblico, basado en la línea de las biblias católicas, pero
que ahora, en lugar de usar la Vulgata Latina como base de traducción,
prefieren usar los originales.
La Biblia Nácar-Colunga fue
publicada en 1944.
Biblia
Reina-Valera 1960
Cipriano de Valera dedicó 20 años a
la revisión de la Biblia de Casiodoro de Reina comparándola cuidadosamente con
diversas traducciones y revisándola en los manuscritos hebreo y griego.
Esta obra ya revisada se publicó en 1602 en la ciudad de Ámsterdam,
Holanda con el nombre de Reina-Valera.
De acuerdo a la traducción de las
tres Biblias autorizadas que poseemos hoy día nos preguntamos cual de estas
tres es la mejor traducción. La Nueva versión internacional. La Biblia de
las Américas o La Biblia Reina-Valera. Estas son las tres versiones más
usadas en el pueblo de Dios por lo cual podemos decir que las tres son muy
buenas para nuestros propósitos.
Aun así podemos recomendar el uso de
la antigua versión de Casiodoro de Reina. Por haber sido extraída directamente
de los originales, pero sin olvidarnos de estas muy excelentes obras como
las que ya hemos mencionado. "Yo prefiero la versión de 1909".
Biblia de
Jerusalén
La Biblia de Jerusalén fue publicada
en 1967.
Es una obra de grandes méritos en el ambiente católico, ya que fue el resultado de haberse apartado de la tradición antigua que usaba la Vulgata latina como base de texto.
Es una obra de grandes méritos en el ambiente católico, ya que fue el resultado de haberse apartado de la tradición antigua que usaba la Vulgata latina como base de texto.
La Biblia de Jerusalén fue traducida
usando los textos originales dejando a un lado la ya mencionada obra que se
usaba para las traducciones de nuevas Biblias.
En 1943 es donde se inicia la nueva
esfera de las Biblias católicas y el deseo de buscar un texto más cercano a los
originales.
Historia de la
división en capítulos y versículos
La Biblia fue siempre la recopilación
de escritos en cuyo texto no existía división alguna, siendo que cada libro
contenía solamente lo que Dios, de manera integral, daba a conocer a su
pueblo. Es por ello que la división de cada libros, tal como la tenemos en
nuestras biblias, no figura en ninguna copia manuscrita antigua, siendo ésta el
resultado de un proceso gradualque se inició en la Edad Media.
a división actual de la Biblia se
atribuye al cardenal Esteban Laugthon, Arzobispo de Canterbury, Inglaterra,
quien la introdujo en la Biblia Parisiensis hacia el año 1226, mientras
que la subdivisión de éstos en versículos fue realizada posteriormente
para facilitar el estudio de los teólogos. En el siglo trece Hugo de
San Caro dividió cada capítulo en siete secciones o partes.En 1528, Sante
Pagnini, un fraile dominico italiano, publicó una Biblia en la que cada
capítulo aparecía subdividido en versículos que abarcaban generalmente una
sola frase u oración completa. Años después –1548- Roberto Esteban, famoso
impresor francés de la época, al imprimir varias ediciones de la Biblia
incluyó su propia numeración de versículos basándose en parte a la
numeración hecha por Pagnini. En 1555 publicó una concordancia bíblica, la cual
hacía referencia a estos mismos versículos, lo que contribuyó a su aceptación
general.
Nueva Versión
griega
En 1975 las Sociedades Bíblicas
Unidas pusieron en circulación la Tercera Edición de The Greek New Testament,
con introducción en castellano, en la cual no figuran los textos agregados
a los manuscritos más antiguos y confiables. Entre los que se encuentran
los siguientes
Mateo 17:21; 18:11; 21:44; 23:14.
Marcos 7:16; 9:44.46; 11:26; 15:28;
16:9-20
Lucas 17:36; 22:43, 44; 23:17
Juan 5:3, 4; 7:52-8:11.
Hechos 8:37; 15:34; 24:6-8; 28: 29.
Debo hacer hincapié que en los manuscritos
más antiguos y confiables el texto de Hechos 20:28 se traduce: «Cuídense a
sí mismos y a todo el rebaño en el que el Espíritu Santo los ha puesto por
obispos para apacentar la iglesia de Dios que él compró su sangre».
Hay otros textos cuya añadidura en la
Vulgata Latina es evidente, aunque ninguno tiene que ver con el aspecto
doctrinal.
Creo importante señalar que el texto
de la primera carta de Juan, capítulo 5 y versículos 7 y 8 figura de la
siguiente manera: «7 Tres son los testigos; 8 el Espíritu, el agua
y la sangre; y los tres concuerdan».
Bendiciones