Acerca de mí



Hola, soy el hermano Juan Jorge Angermüller García -periodista de profesión-, natural del Callao, Perú. Conocí algo de la bendita Palabra de Dios, creyendo el mensaje de salvación, el año 1975 en la iglesia La Voz Divina, de las Asambleas de Dios del Perú, bajo el pastorado del ministro Augusto Cabada.
En completo desconocimiento de la plena Verdad de Jesucristo y de Su obra salvadora, fui bautizado durante una campaña celebrada por el evangelista Yiye Avila en 1977 y comencé a congregar en la Iglesia Pentecostal de Jesucristo, ubicada en el distrito de La Perla, Callao, de donde salí  con destino a Sechura, Piura, llevando el mensaje del evangelio, en enero del año 1981.
De Sechura pasé a Sullana donde permanecí más de siete meses dedicado a la predicación del Evangelio y a la enseñanza de las Sagradas Escrituras.
Predicador del Evangelio Completo, e  ignorante de la gran verdad de Jesucristo, dediqué 15 años de mi vida a colaborar con diversas sectas evangélicas, mientras me dedicaba al estudio de las Escrituras basando éstos sobre tres pilares fundamentales:
         La promesa de ser enseñado por Dios (Juan 6:44, 45)
         La recomendación de no salirme de lo que está escrito (1ra. Cor. 4:6)                    
         La  enseñanza de no interpretar las Escrituras (2da. Pedro 1:19-21)
Estos estudios me llevaron a dudar de la veracidad de las enseñanzas denominacionales, por lo que, después de quince años de predicación con las sectas evangélicas y convencido de que todas basan sus doctrinas en la humana interpretación de las Escrituras, decidí apartarme de ellas y dedicarme a la oración y al estudio de la Palabra mientras, convencido de que la iglesia fundada por Jesucristo y obediente a Su palabra aún está viva, sigo adorando y esperando la respuesta del Señor. Creí que Dios me revelaba Su verdad por intermedio de unos estudios bíblicos proporcionados por el hermano Wayne Partain a través del programa de Biblias y estudios bíblicos e-Sword. Pero mi desilusión vino pronto cuando descubrí que seguían la teología Arminiana acerca de la salvación, por lo cual decidí apartarme y continuar en mi busqueda, convencido que la única regla de fe mediante la cual podemos obtener la vida eterna es el Nuevo Testamento que debemos creer y seguir tal como está escrito, hasta llegar al estado espiritual de Adán antes de la caída, lo cual podemos lograr solamente humillándonos bajo la poderosa mano de Jesucristo . Actualmente,  junto con Nelly Murguía Morales, mi inseparable compañera de milicia a quien considero un regalo de Dios para un ministerio victorioso y una vejez feliz, mientras esperamos encontrar la bendita iglesia de nuestro Señor, aquella que no tiene membretes ni se identifica con teologías humanas, sino que sigue fiel a Su Maestro sin alterar ni adulterar Sus enseñanzas, he decidido continuar predicando el evangelio y apoyando a las congregaciones que los deseen con enseñanzas bíblicas y refutación a doctrinas y religiones falsas. 
Autodidacta por excelencia, he leído muchos tratados y libros teológicos, así como  efectuado comparaciones entre las enseñanzas religiosas y la doctrina de Jesucristo, siendo resultado de ello la edición en 1982 de una separata donde refutaba las enseñanzas de los Testigos de Jehová, que tuvo gran aceptación entre el pueblo evangélico, que recibió enseñanzas acerca del tema.
Ahora, habiendo adquirido mayor preparación tras muchos años de estudio,  he publicado el primero de una serie de estudios denominados Las Armas de Satanás, titulado Los testigos de Jehová, Historia, Creencia y Refutaciones y  tengo listo para su edición otros tratados acerca de las religiones romana, mormona y el Adventismo del Séptimo Día, que considero una secta del Judaísmo, como también de algunas sectas evangélicas. Asimismo he dispuesto mi corazón para apoyar como evangelista y compartiendo las enseñanzas recibidas del Señor a través del evangelismo en todas sus modalidades y enseñanzas acerca de religiones, sectas y doctrinas cristianas.


En caso de alguna duda o el deseo de obtener mayor conocimiento de la Verdad
Comunicarse a: jncristiano@gmail.com


El Señor les bendiga